Radiofrecuencia en casa

Cuando empiezan a hacerse visibles las arrugas y esos pequeños surcos en el rostro, nos damos cuenta de que es el momento de actuar. Puede que empecemos a aplicarnos cremas con el fin de intentar frenar el proceso, pero tarde o temprano hace falta algo más. La radiofrecuencia facial es un tratamiento que se ha mostrado muy eficaz para combatir las arrugas, ya que incrementa la producción de colágeno, proteína principal encargada de rellenar el rostro. Y la radiofrecuencia en casa es una excelente alternativa tanto para la cara como para el resto del cuerpo. Es bastante sencilla de aplicar y no es un tratamiento invasivo.

Cómo funciona la radiofrecuencia en casa

El funcionamiento de los aparatos de radiofrecuencia para el hogar es exactamente el mismo que el de las máquinas que se emplean en las clínicas y centros especializados. De hecho algunos de ellos son los mismos.

Tan solo hay que colocar el cabezal del aparato sobre la zona que se quiere tratar e ir moviendo este despacio. Se notará algo de calor, ya que las ondas electromagnéticas que emite son las responsables de estimular el tejido para que se forme el colágeno.

Para que un aparato de radiofrecuencia funcione adecuadamente es importante seguir muy bien las instrucciones que se adjuntan o dejarse orientar por alguien con experiencia. De no ser así podrían producirse quemaduras o daños en el interior de la piel.

Precio de la radiofrecuencia en casa

Comparado con acudir a un centro la radiofrecuencia en casa es más económica, sobre todo porque cada vez hay más aparatos diseñados para ser utilizados de este modo. Hay varios fabricantes que se han lanzado al mercado con sus propias máquinas, aunque si se busca algo de calidad no conviene mirar solo el precio. Entre 500 y 1000 euros es el precio alrededor del que puede girar un aparato recomendado, mucho menos que varias sesiones de radiofrecuencia en una clínica.

Cuándo no es recomendable la radiofrecuencia en casa

No siempre se recomiendan los tratamientos de radiofrecuencia caseros. Si se persigue eliminar por completo el acné, las arrugas o determinadas marcas, lo mejor es ponerse en manos de profesionales con aparatos más sofisticados. Un aparato de radiofrecuencia para casa tiene como fin mejorar el aspecto de la piel a un grado aceptable, pero no completo. Se recomienda para matizar arrugas y pequeños defectos, aunque en casos más profundos esta no es la mejor solución.